La Federación de Baloncesto de Uganda (FUBA) confirmó, hace unos días, al entrenador murciano Alberto Antuña como seleccionador nacional para las eliminatorias al Afrobasket femenino, que se disputarán del 14 al 19 de febrero en tierras ugandesas.

Esta oportunidad suma un nuevo proyecto en el palmarés de Alberto, quien ejerce como técnico asistente en la Selección Femenina de Montenegro y en los Dresden Titans de la ProA de Alemania. Tras su presentación oficial y unos días aclimatándose al país y a la rutina de entrenamientos, tenemos tiempo para hablar con él.

- ¿Cómo surgió la posibilidad de entrenar a la Selección de Uganda?

Durante el mes de noviembre, mediante mi agente Jorge Méndez, apareció la opción desde la Federación de Uganda, donde buscaban el perfil de un entrenador europeo, joven y con experiencia en baloncesto de selecciones. Desde la Federación pusieron todo tipo de facilidades para poder cuadrar fechas. Una vez mi club, Dresden Titans, me facilitó también el poder acudir al campeonato, al igual que la Federación de Montenegro, llegamos a un acuerdo muy rápido.

- ¿Qué has podido ver del país y del equipo y qué impresiones iniciales tienes?

La Federación quiere crear un programa a medio - largo plazo para el baloncesto femenino del país. Al igual que hicieron con el masculino con George Galanopoulos (entrenador del equipo de la G-League de Dallas Mavericks) querían apostar por un entrenador extranjero que pudiese potenciar el baloncesto, y los entrenadores locales.

Actualmente tenemos 6 jugadoras compitiendo en WNCAA, lo cual es un hándicap ya que no podrán venir en febrero al campeonato. Pero la idea es crear un bloque de jugadoras jóvenes U18 / U20 que en un periodo de 2-3 años puedan ser competitivas a nivel internacional en África.

- ¿Qué objetivo tienes en estas eliminatorias al Afrobasket? ¿Hay posibilidad de continuar después?

La Federación hace un esfuerzo organizando las eliminatorias como equipo anfitrión, pero es un reto bastante difícil ya que Egipto y Kenya (quinta y décima de África, respectivamente) están en el mismo grupo, siendo dos selecciones notablemente superiores.

Creo que la idea es crear una identidad, dar la oportunidad de competir a nivel senior a jugadoras jóvenes y crear ese proyecto a medio plazo con un grupo de 16 / 18 jugadoras.

- ¿Cómo valoras tu experiencia en Alemania?

Está siendo una gran experiencia. La Pro A es una liga muy competitiva, con un nivel de organización, infraestructuras y repercusión muy grande. El equipo, siendo su primer año en la categoría, está teniendo un gran impacto. Actualmente en puestos de playoffs, con la permanencia prácticamente asegurada y logrando un gran ambiente en la ciudad cada fin de semana.

Me he encontrado un club muy familiar, que cuida enormemente a los jugadores y entrenadores y me he sentido muy valorado y querido desde el primer momento. Dresden es una ciudad fantástica donde puedes disfrutar una gran calidad de vida.

- ¿Echas de menos el baloncesto español?

Intento estar conectado. Veo mucha LEB Oro y Liga Femenina Endesa. Obviamente echo de menos el día a día y mis rutinas en España, amistades y familia.

Pero, sinceramente, estoy muy contento de lo que me he encontrado en Dresden y la competición en particular. Estoy seguro que volveré a entrenar en España, pero este tipo de experiencias en el extranjero son muy recomendables ya que tanto profesional como personalmente ayudan mucho a evolucionar y desarrollarte.